La esgrima es un deporte olímpico que se juega con espada, florete y sable, cuyo objetivo es tocar al oponente con una de estas armas blancas, según el tipo de disputa, sin que exista contacto corporal.
Sus orígenes se remontan a tiempos prehistóricos, ya que el arte de la caza da evidencia de lo que serían las prácticas deportivas.
La esgrima comenzó a competirse en los Juegos Olímpicos en 1896, en Atenas, en la primera edición de los juegos olímpicos de la era moderna.
HISTORIA DE LA ESGRIMA
Según registros históricos, la esgrima apareció como deporte en Europa en el siglo XVI. Pero su práctica es muy antigua, al fin y al cabo la humanidad lo utilizó como medio de supervivencia para cazar, luchar y defenderse del enemigo.
La historia de la evolución de la esgrima está entrelazada con la evolución de las armas y las formas de luchar. Un trozo de madera era un arma, que fue sustituida por trozos de metal, dando paso a los arqueros a caballo, luego a los hombres a caballo armados con sus espadas y armas de fuego.
En la época del feudalismo la forma de luchar empezó a cambiar y con ello las espadas también sufrieron cambios, volviéndose más fuertes y también más delgadas en las puntas, lo que pasó a ser más utilizado. Aunque el estudio de la esgrima se inició en Italia, las primeras escuelas de esgrima fueron francesas.
Con el tiempo, el equipamiento utilizado en la práctica de la esgrima evolucionó, con la incorporación de chalecos, guantes y máscaras.
En el siglo XVIII se inició la esgrima moderna y las máscaras cubrían los ojos, protegiéndolos. Así, la esgrima es vista como un deporte, con beneficios físicos y mentales para sus practicantes, entre ellos: aumento de la agudeza visual, auditiva y táctil, desarrollo de la agilidad, concentración, desarrollo de reflejos y aumento de la confianza en uno mismo.
En 1913 se fundó la Federación Internacional de Esgrima, encargada de organizar la práctica y gestión de este deporte a nivel internacional.
En Brasil, la práctica de la esgrima se remonta al período imperial, gracias a Dom Pedro II. Las tropas hicieron uso de él, por lo que se introdujo en los cursos de la Escuela Militar en 1858.
Posteriormente, en 1906 apareció el Curso de Formación de Gimnasia y con la creación del Centro Militar de Educación Física, el maestro de armas francés Lucien de Merignac se animó a venir a Brasil.
El maestro Gauthier es otro francés contratado por el ejército brasileño para enseñar esgrima a sus soldados. Con el apoyo del Ejército y la Marina, en 1927 surgió la Unión Brasileña de Esgrima. La primera participación de Brasil en esgrima en los Juegos Olímpicos ocurrió en 1936.
EQUIPO DE CERCADO
Espada: con 0,90 my 770 g, es el arma más pesada. En la esgrima con espada, la espada puede tocar cualquier parte del cuerpo y, a diferencia de otras disciplinas, se permiten toques simultáneos por parte de los oponentes. Fue el arma utilizada entre finales del siglo XIX y principios del XX.
Frustrar: Con 0,90 y 500 g, es un arma contundente, considerada la más difícil en esgrima. Ligero, exige movimientos elegantes. Con el estoque sólo se puede tocar el tronco con la punta de la espada. Fue el arma utilizada en el siglo XVIII.
Sable: con 0,88 y 500 g, es el arma más pequeña utilizada en esgrima. Con él, se permite tocar al oponente con la punta o el costado de la hoja. La espada y el estoque se tocan solo con la punta. En la esgrima con sable, el arma puede tocar la cabeza, el torso, los hombros, los brazos y los antebrazos.
LAS REGLAS DE LA ESgrima
La esgrima se juega en una pista de 14 x 2 m y tiene dos fases: clasificatoria y eliminatoria. En las eliminatorias se llevan a cabo peleas entre todos los atletas hasta que alguien logra sumar cinco puntos. En la siguiente fase, la competición se desarrolla en tres saltos de tres minutos cada uno. Con cada salto hay un descanso de 1 minuto. El tirador que tenga más puntos, un total de 15, gana la competición. Los puntos se calculan electrónicamente.
Esto sucede porque la ropa de los esgrimistas tiene sensores. Antes de que se adoptara esta forma, las armas tenían rastros de tiza que marcaban la ropa del oponente, lo que dificultaba el voto de los jueces. El objetivo es golpear el torso del esgrimista contrario con la punta del florete. En el caso de una espada, su punta puede llegar a cualquier parte del cuerpo. Mientras tanto, la punta del sable y otro ⅓ del arma que se mide desde la punta, pueden llegar hasta la cintura o la región que la rodea.