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La natación y sus beneficios

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Hoy vamos a hablar de la natación, que se practica en el agua, combinando movimientos de brazos y piernas, y que los humanos realizamos tras aprender instintivamente. Por lo tanto, la natación es una actividad muy útil y recreativa.

Por ello, se considera uno de los ejercicios más completos, hasta el punto de ser practicado por diversión o incluso como deporte, hasta ser utilizado con fines terapéuticos en la recuperación de la atrofia muscular y tratamiento de problemas respiratorios e incluso cardíacos.

Además, la natación es muy importante como actividad física para mantener la salud y como medio de defensa contra el ahogamiento o incluso en operaciones de rescate.

Debido a que mueve prácticamente todos los músculos y articulaciones de todo el cuerpo, la natación es considerada uno de los mejores ejercicios físicos que existen, aportando grandes beneficios al organismo, siendo además la única actividad física recomendada para niños menores de 3 años.

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¿Cómo debe ser la piscina para nadar?

Una piscina oficial debe tener 50 metros de largo y 25 metros de ancho. Por lo tanto, debe estar dividida en ocho carriles, cada uno ocupado por un solo nadador. Cada carril debe tener 2,5 metros de ancho. La profundidad de la piscina debe estar entre 1,35 y 2 metros.

La temperatura del agua debe estar entre 25° y 28° C. Pero también existen temperaturas más altas como 33,5° a 36,5° C, normalmente estas temperaturas son utilizadas en piscinas terapéuticas que están destinadas solo para movimiento limitado, siendo demasiado altas para una inmersión rigurosa.

Hay 6 tipos diferentes de natación:
1- Buceo acuático
2- Saltos
3- Natación sincronizada
4- Natación pura
5- Waterpolo
6- Aguas abiertas

Beneficios

La natación ofrece muchos beneficios: te proporciona más energía y una sensación de bienestar, relajación, ligereza y libertad, lo que te permite afrontar mejor la vida cotidiana. Además, reduce el dolor porque el cuerpo se siente más ligero en el agua.

Los músculos posturales utilizados para estar de pie se tensan menos, lo que permite activar mejor otros músculos mientras se relaja la zona lumbar. Esta ligereza y relajación también previene lesiones musculares y reduce la frecuencia cardíaca.

Esto provoca la activación de la circulación sanguínea, ya que cuando estamos en el agua, la presión hidrostática permite que esto suceda.

Esto mejora la oxigenación muscular. Trabajar un músculo bien irrigado aumenta el potencial de rendimiento. La natación también tiene un efecto beneficioso sobre la respiración, ya que los movimientos realizados en el agua tonifican el diafragma, el músculo respiratorio esencial, lo que permite una mejor ventilación pulmonar.

Hay buenas razones para practicar natación, como la presión del agua, que tiene un efecto de frenado automático, evitando que el nadador se esfuerce más de lo que puede y reduciendo el riesgo de desgarros o distensiones musculares. Además, en el agua, el cuerpo se vuelve más ligero, lo que permite realizar ejercicios atléticos con gran facilidad. Es una actividad ideal para embarazadas.

Contraindicaciones

No hay contraindicaciones para la natación, todos son bienvenidos, desde bebés hasta personas mayores o personas con discapacidad.

Es un deporte muy inclusivo. También se utiliza mucho para la rehabilitación y la pérdida de peso.

Muchos médicos también lo recomiendan para personas que tienen problemas respiratorios.